lunes, 31 de diciembre de 2012

Una bolsa de almuerzo diferente

Ana y yo no somos de las que les gusta repetir en serie una y otra vez lo que hacen, al contrario, aunque nos lleve mas tiempo, nos encanta hacer cambios en nuestros productos, modificarlos, de manera que sean muy personales e individuales para la persona a la que van dirigida. Aún así si nos piden que hagamos otro igual, siempre cambiamos algo (somos unas pequeñas rebeldes que se le va a hacer).
Pues bien, cuando mi compi Anastasio vio las bolsas no  dudó ni 30 milésimas de segundo en decir: " yo quiero una para mi Blanquita, y aunque le gustó mucho el mono, mencionó al final eso deeee, pero bueno hacedla como queráis.¡En fin! Que yo ya no escuché nada más.
Blanca, es una niña preciosa con unos enoooorrrmeeess ojos azules, es decir, que tiene dos ventanas grandes para mirar el mundo, y por eso me acordé de los buhos. ( No porque la niña no duerma por las noches que no es así). Así que pensando en ella, a dibujar la bolsita y a coserla. 
No se si a la peque, que tiene dos años, le ha gustado o no, pero me quedo con que a los papis si les ha gustado mucho, mucho y eso es lo que cuenta.
Espero que a vosotras también os guste.





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